La hermosa plaza central sigue siendo un tributo a su homónimo, Vasco de Quiroga trasladó la capital de Tzintzuntzan a la hermosa ciudad montañosa de Pátzcuaro en 1533 y construyó una gran basílica. También fundó el Colegio de San Nicolás Obispo en Pátzcuaro.
La actividad volcánica y la posición de latitud del estado ayudan a crear un entorno similar a Hawái. El rico suelo sostiene una exuberante vegetación similar a la jungla, con espectaculares paisajes montañosos y pastizales de terciopelo. El estado tiene pocas ciudades grandes, pero es más bien una colcha de pequeños pueblos y ciudades que han cambiado poco desde principios del siglo XIX. Su ritmo es pausado, su gente amable y su rica herencia colonial española e indígena.